jueves, 6 de noviembre de 2014

¿Burkina Faso en el ALBA?

Marinella Correggia, Roma, 06/11/2014

Articolo in italiano

El 31 de octubre de 2014 el pueblo de Burkina Faso obtuvo la dimisión y la salida del presidente Blaise Compaoré, en el poder desde hacía 27 años, después del golpe de estado que el 15 de octubre de 1987 asesinó la revolución del “País de los íntegros” y a su guía, el entonces presidente Thomas Sankara, de 37 años. La “revolución de la dignidad” en solo cuatro años transformó el paupérrimo país saheliano en un laboratorio de futuro, de justicia, solidaridad, antiimperialismo, paz, ecosocialismo podríamos decir. Todo muy incómodo para las élites mundiales y para las africanas.

No sabemos aún si el levantamiento de estos días se transformará – a causa de las injerencias extranjeras, en particular de Francia- en una de las tantas “primaveras manipuladas”, o si el país saheliano recuperará la revolución de Sankara. Los sankaristas que junto a otras fuerzas participaron en las manifestaciones callejeras en Burkina Faso han dedicado esta victoria parcial al expresidente burkinés.


Alassane, burkinés sankarista que vive en Italia, nos dijo: “Espero, por mi país y por mi pueblo, una verdadera revolución, como la de América Latina… Sankara era amigo de Fidel y de Nicaragua; el presidente Chávez llegó al poder cuando él llevaba  más de diez años muerto, pero lo citó varias veces”.

A una gran esperanza, Burkina en la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) con muchos otros países africanos, dedican un pequeño sueño, ambientado en el 2017, a 30 años de la muerte de Thomas Sankara. ¡Que se cumpla!

1º de enero de 2017. La página en Internet atendida en 22 idiomas por un grupo de estudiantes de Burkina Faso hace un balance del año recién concluido.

“Nuestro país ha sido condecorado por Bolivia y Ecuador con el premio ‘Sumak Kawsay’. En lengua quechua andina significa ‘Buen vivir colectivo’. Nosotros los burkineses lo hemos logrado en pocos decenios, partiendo de una condición de muertos de hambre, en una nación que era “el concentrado de todas las desgracias del mundo”, como dijo nuestro presidente Thomas Sankara en Naciones Unidas en 1984.

La asociación de cultivadoras de Burkina Faso acaba de asumir la presidencia del movimiento agrícola internacional Vía Campesina y, apoyada por el gobierno, se empeña en perfeccionar la independencia alimentaria del país y el desarrollo de las condiciones de vida en el campo.

La seguridad y la soberanía alimentarias (“Comemos lo que producimos, producimos lo que comemos”) se alcanzó desde hace varios años, a pesar de las condiciones climáticas desfavorables, al punto que nuestros agricultores y nutricionistas son regularmente utilizados como consultantes incluso por un Occidente cada vez más en crisis, donde por suerte los migrantes – los que no han regresado aún a los países de origen- han comenzado a tomar cartas en el asunto.

Finalmente la barrera contra el desierto en Burkina Faso fue concluida y árboles resistentes a los climas áridos -  neem, moringa, mangos, tamarindos, albaricoqueros africanos, pistachos, karité, acacias, dátiles chinos – pueblan campos y ciudades, alrededor de las casas y escuelas dotadas de paneles fotovoltaicos, secaderos, bombas, cocinas, maquinarias agrícolas, todo con energía solar.

Estamos exportando a los países amigos diversos principios activos útiles para curar enfermedades de masa antes descuidadas, obtenemos en cambio materias primas necesarias y tecnología. Ya formamos parte de un consocio internacional reconocido en materia de sanidad para todos, junto a Cuba y Venezuela, entre otros.

Partiendo de una reunión de jefes de Estado africanos en Addis Abeba en 1987, impulsada por nuestro presidente Sankara, fue creado un frente unido contra la deuda externa y para la unidad de toda África. Ya el proyecto ha dado frutos y la deuda injusta no la paga más ningún país del Sur del mundo… Los especuladores jugaron durante mucho tiempo, pero al final  perdieron.

Burkina Faso y otros 25 países integran el Alba internacional (Alianza Bolivariana para los pueblos de América Latina, Asia y África), un proyecto de cooperación y no de competición entre países y naciones  hermanos. Originalmente se llamaba Alba. Nació en 2004 en América Latina por obra de los gobiernos revolucionarios de Cuba y Venezuela y se extendió rápidamente a otros países progresistas de América del Sur.

Después de la revolución de octubre de 2014, que obligó al presidente Compaoré a dimitir,  nuestro país casi inmediatamente se convirtió en el primer miembro africano de la Alianza, arrastrando luego a otros  y los resultados en términos de desarrollo colectivo en pocos años han sido  tan evidentes que los pueblos de diversos países africanos y asiáticos votaron en las elecciones a favor de candidatos que tenían los principios y la adhesión al Alba en sus programas.

Un proceso en cadena. El Alba, cuyos miembros están en paz desde hace tiempo y no hacen guerras, fue nombrada por Naciones Unidas mediadora en caso de conflicto entre estados e internos. Ya en varias ocasiones a partir de 1991, antes del Alba, los países no alineados  lograron desenmascarar ante la opinión pública los pretextos que hubieran conducido a una guerra en Medio Oriente por parte de la organización militarista ofensiva OTAN, un consorcio de países occidentales beligerantes con frecuencia en contubernio con las petromonarquías medievales del Golfo.

Lo olvidaba: la OTAN está en vía de desintegración. Nadie sentirá su ausencia.

_________________

Para un blog es muy importante que el lector haga el esfuerzo de clicar en los botones sociales "Me gusta", "Tweet”, “G+”, etc. que están por debajo o a lado. Gracias.

Per un blog è molto importante che il lettore faccia lo sforzo di cliccare sui tasti social "Mi piace", "Tweet", “G+”, etc. che trovate qui sotto o a lato. Grazie

No hay comentarios :

Publicar un comentario